Takeo y Suna son vecinos y han sido amigos desde la infancia aunque aparentemente no tengan nada en común. Mientras Takeo es una persona energética, ruidosa e impulsiva con un físico contundente , Suna es un chico apuesto, inteligente y discreto. Takeo tiene muchos amigos pero todas las chicas se enamoran de Suna quien las rechaza inexorablemente, pues no parece estar interesado en ellas. Un día mientras vuelven en metro del instituto, Takeo ayuda a Yamato, a una chica que está siendo molestada por un acosador. Takeo y Yamato se enamoran a primera vista. El problema es que Takeo da por sentado que ella se ha enamorado de Suna.
Es un anime muy muy muy divertido. Lo que más choca son las diferencias físicas entre los personajes. Suna tiene un tamaño estándar mientras Takeo es enorme y Yamato es extremadamente pequeña. Takeo y Yamato son tal para cual y, aunque a priori nos choque verlos juntos, hacen una muy buena pareja. Suna me tiene el corazón robado pero no por lo obvio. Lo más destacable de Suna no es que sea guapo sino lo buen amigo que es y es muy gracioso ver cómo Takeo se flipa y se monta películas y Suna lo devuelve a la realidad soltándole una obviedad que él había pasado por alto. La relación entre estos tres es genial y el resto de personajes también son para nota. Todo un descubrimiento, la verdad es que me ha encantado un anime muy divertido y súper kawaii.
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