He descubierto que existen aplicaciones que se inventan las historias y los personajes por ti. Ahora entiendo muchas cosas. Entiendo que haya gente que tenga una cantidad de libros autopublicados más larga que los créditos de una película de ciencia ficción y entiendo que haya tanta basura colapsando las redes. Me he descargado una de esas aplicaciones (la más seria que he encontrado) y me parece genial para hacer el tonto un rato o para poner un ejercicio de redacción a los alumnos de un instituto. Pero cuando se trata de escribir una novela las cosas son mucho más complejas. En la aplicación te dan a escoger una serie de características y a partir de ahí te generan un personaje. Las opciones son sexo, época y nacionalidad. Pero se limitan a hombre/mujer, actual/antigua y latina/anglosajona lo que me parece tremendamente limitado. Además de que en el caso de las épocas la indefinición es total y el resutado suele dar personajes antiguos con actitudes actuales, al menos en las pruebas que yo he hecho. Eso sin contar con que si quieres ambientar tu novela por ejemplo en Japón te encuentras con que los asiáticos no existen. En el caso de las historias la cosa es todavía más limitada, solamente eliges el género literario y obviamente no están todos. No digo que si se usa con cabeza no sea útil para coger ideas pero esperar que te haga todo el trabajo es absurdo. Además de que pretender convertir una herramienta en tu forma de trabajo es hacer trampa y deja el arte de escribir a la altura del betún. Tal vez deberíamos plantearnos si queremos leer una buena novela o con cualquier cosa nos vale.
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