Después de estar nueve años trabajando sin descanso para un jefe al que sólo ella es capaz de aguantar, Kim hace revisión de su vida y decide presentar su renuncia para poder vivir su propia vida, casarse y poder fundar una familia en lugar de dedicarse únicamente al trabajo. Su jefe no entiende por qué narices tiene que hacer eso y pone en marcha un plan para evitar que se vaya. Al parecer ese hombre tan egocéntrico y caprichoso no es tan insensible como parece.
Es un manhwa muy entretenido y la verdad es que me ha gustado bastante. Los personajes (sobre todo él) son más complejos de lo que parecen y ocultan más de lo que muestran. A medida que avanza la trama, vas descubriendo su trasfondo y entiendes cosas que al principio te chirriaban.
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