Hay personajes de anime que desprenden perlas de sabiduría y modifican para siempre tu filosofía de vida. En otras palabras: hay un antes y un después y nunca volverás a ser el mismo. Hoy voy ha hablar de dos de ellos, dos personajes que me han hecho ver la luz y la realidad del mundo.
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| Shikamaru Nara |
El primero es Shikamaru Nara de la serie Naruto. En cuanto lo vi aparecer me robó el corazón. Mis amigos no entendían por qué me gustaba semejante inútil pero yo no podía evitar sentir debilidad por él. No me equivoqué terminó siendo uno de los personajes más importantes de la saga aunque a mi parecer no se le ha sacado suficiente partido. Para Shikamaru todo es un fastidio. Su anhelo profundo era ser una nube y su ideal de vida era trabajar unos años de ninja, retirarse pronto, casarse con una mujer normal (😂🤣😂🤣) tener un par de hijos corrientes, un niño y una niña (🤭) y pasarse el día jugando al shogi (🤣🤣🤣🤣🤣🤣) los que hayan visto las series entenderán por qué me rio. Lo triste es que tenía razón el mundo es una mierda y todo es un fastidio, además esforzarse da fatiga porque al final todo acaba siendo un desastre porque el sistema es una porquería.
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| Glenn Radars |
Hablemos ahora de Glenn Radars de la serie rokudenashi majutsu koushi to akashic records (los registros akashicos del profesor de magia inútil), rokudenashi para los amigos. Eso ya es otro nivel. Glenn Radars ha sufrido un trauma (que aún no sé cuál es porque el anime sólo tiene una temporada y el manga sigue abierto y aún no lo he leído) y la vida para él no tiene sentido no quiere trabajar ni hacer nada (de hecho si trabaja es porque está bajo amenaza de muerte). Para él una de las pocas cosas buenas en este mundo es la comida y su único objetivo es casarse por dinero para no tener que trabajar y poder flojear toda su vida. Y ni siquiera ha tenido que elaborar su sueño se le ha presentado la ocasión por casualidad y está dispuesto a aprovecharla. En realidad toda la apatía de estos dos los personajes es pura fachada, una coraza para ocultar a dos pedazo de tsunderes idealistas que a la hora de la verdad se dejan la vida para defender aquello que realmente les importa. Gracias a sus enseñanzas he cambiado mi objetivo vital. Antes quería labrarme un futuro, ahora he descubierto que eso es absurdo, que esforzarse en un fastidio y que lo mejor es que te toque la lotería y flojear toda la vida.
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