Este parece ser el típico manhwa de matrimonio concertado pero en realidad no lo es. La premisa es la clásica en que un tirano poderoso con fama de matar a todo el que se le pone por delante solicita la mano de una noble señorita que es entregada por su familia sin siquiera pensárselo (muchas veces para evitar enviar a su hermana a la que quieren más). El desarrollo es paródico desde el principio. Estian, el emperador malo malísimo, se ve obligado a casarse pero su interés es tanto que tira los dados para elegir a su esposa. Cecil es la hija ilegítima de un noble que la tiene en un anejo del palacio como si fuera un perro y sólo lo hace porque se parecen tanto que no puede negar que es hija suya. De hecho cuando recibe la propuesta de matrimonio se alegra de quitársela de encima y no solo eso sino que aprovecha para pedir una cuantiosa dote. Cecil está segura de que va a morir así que decide cabrear al emperador haciéndole peticiones absurdas para que tome represalias contra su familia. Quiere morir a lo grande y morir matando. Para su sorpresa Estian la trata bien y ambos se enamoran a primera vista. Después de sufrir cuatro intentos de asesinato durante su noche de bodas idean un plan. Cecil debe fingir que es una auténtica perra y que tiene sometido a Estian. Muchos quieren matar al emperador y disfrutarán viéndolo sufrir y no puede permitirse que su esposa se convierta en su punto débil.
A medida que avanzas la trama se complica. Es un isekai, la historia se repite en bucle, hay dragones, experimentos genéticos, duendes, magia, mensajes interdimensionales, conversaciones con tus otros yo...una locura. La verdad es que a ratos me he perdido un poco pero también me he reído bastante sobre todo con el dragón que no tiene desperdicio y el mago también es para nota. El final me ha gustado mucho porque no es el típico. Vale la pena leerlo.
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