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viernes, 25 de noviembre de 2022

Kaguya-sama: el amor es la guerra

En el consejo estudiantil de la academia Suchiin, un centro de élite donde se forman los hijos de las familias más poderosas, se está librando una despiadada batalla entre el presidente, Shirogane Miyuki, el mejor alumno de la escuela y la vicepresidenta, Shiromiya Kaguya, la segunda mejor y la hija de una de las familias más poderosas del país. Ambos están perdidamente enamorados el uno del otro pero su orgullo les impide declararse porque en su mente retorcida, el que se enamora pierde y aquél que se declara queda a merced del otro en una relación. El plan de ambos es el mismo: conseguir que el otro se declare antes y para ello no dudarán en utilizar cualquier estrategia que esté en su mano por absurda que ésta sea. Para ellos la vida es una partida de go y ninguno de los dos esta dispuesto a ceder. En el consejo también está la secretaria, Fujiwara Chika, una muchacha risueña e impulsiva que no se entera de nada pero siempre la lía y el tesorero, Ishigami Yu, un emo casi fantasmal que se da cuenta absolutamente de todo. Más tarde se les une como asesora Miko Iino, una chica demasiado estricta e idealista.
Un divertidísimo anime que parece un shojo pero en realidad es un seinen y se nota por lo elaborado de sus estrategias y la cantidad de guiños que los espectadores de cierta edad para abajo no van pillar fácilmente. Muy graciosa la banda sonora modificada para no pagar derechos pero perfectamente reconocible para entender referencias culturales. Los personajes están muy bien construidos y las situaciones son como mínimo curiosas de ver. Un anime espectacular pero no apto para no iniciados.
 

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