Zhang Xiao es una joven recién graduada que proyecta abrir un restaurante de hot pot con su mejor amiga y llevar una vida tranquila. Su vida se pone patas arriba cuando se encuentra casualmente con Mu Chen, un joven empresario viudo con una hija muy pequeña. Mientras Xiao y Chen discuten por un altercado de tráfico la niña se escapa de su cuidadora y se va directa a Xiao, le extiende los bracitos y la llama mamá. Chen, atónito ante tal situación, coge a su hija y se va pero después de darle muchas vueltas se traga su orgullo y le propone a Xiao que trabaje para él cuidando de su hija. Xiao en principio se niega pero sucumbe ante los encantos de la pequeña que llora desconsolada cada vez que se separa de ella. Las condiciones del contrato son muy generosas pero la claúsula cinco es un poco extraña: no puedes enamorarte de mí. ¿Qué tipo de claúsula es esa? ¿Acaso se cree tan irresistible que da por echo que todas las mujeres se enamorarán de él? Xiao se ríe de él por poner esa condición porque da por sentado que jamás se fijará en un hombre como él y se limita a aceptar el trabajo. Siente compasión por la pequeña Mu Ya y con el dinero que ganará le será más fácil abrir su negocio. Para sorpresa de ambos, no son dos desconocidos como ellos pensaban, sino que sus vidas están relacionadas desde hace mucho.
Un manhua muy entretenido y fácil de leer. Se agradece que la protagonista tenga las ideas claras, un carácter marcado y sea coherente con sus actos y no la típica pánfila que se deja pisotear por todos pretendiendo ser una mujer empoderada. Por otra parte Chen, aunque es un tsundere, no es el típico CEO tóxico de la mayoría de los manhuas que sólo quiere a la protagonista como un trofeo o posesión. Él en realidad se enamora de Xiao, pero se siente culpable por su esposa fallecida y le preocupa perjudicar a su hija por lo que debe lidiar con sentimientos encontrados. Hacia el final de la obra se les va un poco la olla con los líos familiares y de empresa y se vuelve un poco un culebrón desatado, vamos que lo complican todo de manera innecesaria. Aparecen muchos personajes de golpe y te pierdes porque hay tramas y subtramas que no acaban de quedar claras pero no son importantes para la historia principal así que se puede leer sin problemas. Las historias secundarias también están bien aunque hubiera preferido que fueran menos y estuvieran mejor desarrolladas. En resumen: un manhua distendido para pasar el rato sin pensar demasiado. Y sólo tiene 200 capítulos todo un hito para ser un manhua.
No hay comentarios:
Publicar un comentario